La idea que se anuncia es la de crear un equipo en el que charros y charras compitan juntos
A unos pocos días de debutar en el circuito charro, dentro del Campeonato Charro Internacional de Puerto Vallarta, Jalisco, Rancho La Romana inicia su andadura en la charrería con un gran proyecto innovador e inclusivo, siendo el primer equipo mixto en la historia de la charrería; esto quiere decir que en sus filas estarán integradas por hombres y mujeres en conjunto para realizar las diez suertes de la charreada.
Esta iniciativa nace de su principal premisa en que “nosotros creemos en la evolución del deporte y en charros de La Romana, al igual que en el resto de los deportes ecuestres, no distinguimos géneros, solo vemos jinetes”.
El equipo tendrá su sede en Guadalajara, Jalisco, y estará capitaneado por Luis Miguel Rivera, descendiente de una reconocida dinastía floreadores de soga y que ha llevado el nombre de México y de la charrería por muchos países del mundo.
Rancho La Romana forma parte de la ya consolidada Academia Ecuestre La Romana fundada por Marcos Murillo y que hasta el día de hoy cuenta con tres sedes: Mérida, Metepec y recientemente Jerez de La Frontera, España, donde se imparten clases de Salto, Dressage y Enganche de manos de los más destacados profesionales de cada disciplina.
Algo muy importante a destacar es que uno de los principales objetivos de este nuevo equipo charro no solo es la competición en torneos, campeonatos o charreadas amistosas si no es ser parte de un grupo que estará dando constantemente exhibiciones y shows en distintos países de Europa, África y Sudamérica como ya lo comenzaron a hacer el pasado noviembre en SICAB (Salón Internacional del Caballo de Pura Raza Española) en Sevilla, donde formaron parte del espectáculo principal del evento.
También se presentaron en la Real Escuela Andaluza de Arte Ecuestre de Jerez, presentado por primera vez en la historia un espectáculo charro, o bien realizando una pequeña exhibición de floreo en el norte de África, específicamente en Tánger, Marruecos.