El pasado miércoles, Salvador Barajas del Toro asumió oficialmente la presidencia del Consejo Directivo Nacional de la Federación Mexicana de Charrería (FMCH) para el periodo 2024-2028. Su llegada representa no solo un cambio administrativo, sino también una oportunidad para redefinir el rumbo de la máxima casa rectora del deporte nacional mexicano. Consciente de ello, Barajas del Toro presentó una serie de propuestas iniciales que apuntan a fortalecer el deporte nacional y su impacto cultural, social y económico.
Uno de los planes iniciales se trata de escuchar y atender las inquietudes de la mujer de a caballo, por lo cual este viernes 13 de diciembre se encuentra convocado un Encuentro, con tres mesas de trabajo que cubrirán los principales aspectos del sector femenil, y que se realizará en la ciudad de Morelia.
Ha levantado mucha expectativa la rotunda afirmación que realizó Salvador Barajas del Toro respecto a que los equipos que compitan en los Congresos y Campeonatos Nacionales a celebrarse durante su cuatrienio deberán ganar sus pases de forma deportiva, en los distintos filtros eliminatorios: campeonatos estatales, regionales, campeón nacional precedente, quedando por definir, por parte de las asociaciones, si se continuará con la práctica de lugares asignados por estados, o bien se procederá a la clasificación por medio de los promedios y una tabla general.
Para Salvador Barajas, y para los integrantes de su Consejo Directivo Nacional, el parecer de las asociaciones de charros es fundamental, de manera que informó en rueda de prensa que las agrupaciones recibirán en breve un correo electrónico con un cuestionario, solicitando su opinión respecto a diversos temas claves para el futuro del deporte de la charrería, en distintos aspectos.
Es importante resaltar que declaró que acatará la decisión de las asociaciones de charros de los Estados Unidos de América, quienes elegirán en próximos meses a su Coordinador Nacional en aquella nación vecina del norte, lo que habla a mi parecer de una madurez en cuanto a la naciente gestión que deberá llevarse a cabo entre la Federación y su nuevo Consejo Directivo, y la cada vez creciente comunidad charra en los EE.UU.
Todo nuevo liderazgo enfrenta retos. Uno de los más importantes será encontrar el equilibrio entre tradición e innovación. Si bien la modernización es necesaria, es crucial que las nuevas estrategias no diluyan los valores que hacen de la Charrería un deporte único a nivel mundial.
Las propuestas iniciales de Salvador Barajas del Toro reflejan una visión ambiciosa y necesaria para el futuro de la Charrería. Ahora, el verdadero reto será traducir estas ideas en acciones concretas y efectivas. Como aficionados y defensores de esta tradición, nos corresponde seguir de cerca su gestión y, en la medida de lo posible, contribuir a preservar este invaluable legado.
La del estribo
Ciertamente quedó alta la vara que dejó la administración saliente de la Federación Mexicana de Charrería, encabezada por el ingeniero José Antonio Salcedo López, en cuanto a la difusión del deporte de la charrería, con impresionantes números que nunca se habían visto desde la incursión del deporte nacional en la red internet: más de 1.2 millones de seguidores en todas las plataformas oficiales, y más de dos millones de visitas al sitio web oficial fmcharreria.org.mx
Personalmente, estoy seguro que este nuevo Consejo Directivo Nacional no solo mantendrá esta calidad de labor de la difusión de la Charrería, sino que la mejorará, apoyado en las bondades de la tecnología, capaz de llevar el acontecer charro hasta el último rincón del globo terráqueo, y conjuntando un equipo de trabajo eficaz y competente en torno a la vital secretaría de Prensa y Difusión.
